29 de abril de 2016

Que nadie.

Que nadie te diga ni te haga creer que no sos suficiente.
Que nadie te diga que no merecés lo que querés, o que no tenés la fuerza o la capacidad para lograrlo.
Que nadie te diga lo que tenés que hacer, comer, soñar. Eso, que nadie te diga que no podés soñar.
Que nadie te diga que no merecés recibir amor.
Que nadie te haga creer que tampoco podés darlo.
Que nadie te diga que no sos capaz, que te falta algo, que estás incompleto.
Que nadie te diga que no servís para nada.
Que nadie te diga que sos feo, o que alguien "más lindo" tiene ventajas sobre vos.
Que nadie te diga que lo que hacés está mal, si no estás dañando a nadie.
Que nadie te diga que te merecés castigos.
Que nadie te diga que sos incapaz de avanzar en la vida.
Que nadie te diga que no podés ser feliz.
Que nadie te diga que las cosas "malas" que le pasan son tu culpa. Que nadie te eche la culpa de nada.
Que nadie te haga sentir insignificante.
Que nadie te haga sentir odios.
Que nadie te haga sentir inferior.
Que nadie te haga sentir a un lado.
Que nadie te haga creer que no valés.
Que nadie te haga creer que sin vos todo es lo mismo.
Que nadie te haga creer que nunca te van a elegir.
Que nadie te insulte.
Que nadie te quite tus derechos.
Que nadie te obligue a hacer nada que no quieras.
Que nadie te juzgue o discrimine por cómo te vestís, por tu color de piel, por tu religión, por tus creencias, por tu sexualidad.
Que nadie te diga que tenés que ajustar tu vida a las reglas de la sociedad.

Que nadie te diga cómo tenés que ser.

Y si algo de todo esto pasa, solamente recordá que estás vivo por algún motivo, aunque todavía te sea incomprensible. Que el Universo tiene su orden y vos sos parte imprescindible de él.
Que siempre hay gente que te ama, que tenés miles de capacidades y que a veces todos nos caemos, que es normal sentirse hundido, pero eso sirve para crecer y para probar que podemos volver a nadar en la superficie.

No hay comentarios: