16 de junio de 2016

¿Cuántas veces se puede volver a empezar?

Armás una vida cuando armás una casa.
Cuando hacés que cuatro paredes se transformen en un hogar.
Cuando el aire huele a mermelada casera o a pan en el horno.
Cuando laburás por aquello que se convierte en básico a la hora de vivir solo o con alguien más.
Cuando sos malísima ahorrando pero a la fuerza aprendés a cuidar tus gastos porque tenés que aprender, al mismo tiempo, a vivir sin depender de nadie más.

Armás una casa constantemente.
Cuando colgás un cuadro nuevo o cuando te tirás a observar ese rincón redecorado mientras te calentás las manos con un té.
Cuando cambiás de lugar los muebles.
Cuando te decidís a tener una mascota.

Armaste un hogar cuando te das cuenta que preferís quedarte en casa.
Armaste un hogar cuando te llegó la cocina nueva.
Y todos sabemos que el fuego es el centro de cualquier universo.

Armaste un hogar.
Empezaste de cero.
Por segunda vez.

¿Cuántas veces se puede volver a empezar?
Las que sean necesarias.

2 comentarios:

Lolo dijo...

Hoy terminé de pagar una deuda con el arquitecto que terminó (mal) mi casa por la mitad. Todavía falta un poco de pintura, comprar muebles y ver dónde ubicarlos, definir a qué va a oler y si puedo convivir con un gato. Pero ya lo siento mi hogar.
No sé cómo llegué acá pero hola, que tengas buena semana y nuevo comienzo.
Un abrazo.

Ale Modarelli dijo...

Muchas gracias! El nuevo comienzo ya estaba comenzado, pero andando. Uno bueno para vos también, feliz casa! :)

PD: Me gustó tu blog.