Hace alrededor de una semana, hice chutney de mango y mermelada de frutillas, para mí.
Es algo que hace rato tenía dando vueltas en la cabeza, y nunca me animaba. Siempre me llamó la atención y jodo con que voy a terminar viviendo en Córdoba vendiendo mermeladas (mucho antes de cocinarlas por primera vez).
Casi en broma, cuando los terminé, subí las fotos a FB.
Y ya vendí un chutney y dos frascos de mermelada de frutilla, lo cual me resulta muy gracioso sin dejar de sorprenderme, porque hacer esto es una tarea casi alquímica, y honestamente, me maravilla.
Me encanta!
Ahora por ejemplo, estoy haciendo mermelada de durazno y lavanda, (de la cual ya tengo un frasco vendido) porque además, amo cocinar con flores.
Más allá de la tarea en sí misma, que era una pequeña cuenta pendiente y se me está transformando casi en un hobby, lo más lindo de todo, es el perfume que hay en casa.
Con ese olorcito dulce, me dí cuenta que donde yo esté, está mi hogar.
Sobretodo si estoy haciendo conservas. :)
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